Tipos de Barba: Barba Media Victoriana o Colonial
Tal vez sea la barba más clásica, elegante y señorial de todas, y por ende es una de las menos llevables también, por el aíre tan señorial, puritano, colonial y de clase que imprime a quien la utiliza; algo que no va a estar muy de moda en estos tiempos de reorganización social a nivel mundial, y es que esta barba tiene su historia, la llevaban personajes muy concretos de la alta sociedad, y eso no va a ser fácil de desligar al porte que imprime a quien la lleva, tal vez más adelante, con más tiempo.
No obstante hay personajes que se atreven a todo como Justin O’Shea que es su máximo representante en la actualidad y con quien ilustro este artículo; icono actual de la city de Londres y quien marca la tendencia para muchos hombres en lo referente a estilo y moda. Pero eso sí, para contrarrestar el efecto que causa esta barba Justin esta lleno de tatuajes, usa pantalones pitillos siempre con el traje, lleva siempre chaleco y camisas pintorescas entre otros muchos detalles de su vestuario y que renuevan el aire clásico de esta barba, y del concepto de caballero o elegancia en el hombre actual.

Esta barba requiere de ir vestido con cierta etiqueta, como un caballero, con mimo en los detalles, no es para llevar con ropa de maderero.
Esta barba tan peculiar proviene de la época victoriana, de la cual se dice que fue el súmmum de la barbería hasta nuestros días pues el cabello natural pasa a ser la expresión exterior del pensamiento, tanto en las barbas puntiagudas que se ponen de moda, como el cuero cabelludo a través del cual las gentes mostraban el estatus social al que pertenecían por el cuidado que tuvieran o no en los perfilados y detalles, especialmente en las disminuciones tanto en pelo como en barba, pues fue en esa etapa de la historia donde surgió y se impuso esa forma artesanal de tratar el pelo “en disminución” buscando el equilibrio áureo del rostro, buscando la distinción una vez superada la época de las grandes pelucas y el maquillaje en los hombres de la etapa anterior llamada “romanticismo”. En la época victoriana ciertas barbas o patillas eran la insignia de un caballero, es decir, de alguien que cuida los detalles y que tiene una ética, educación y principios que exterioriza tanto con la ropa como con su pelo, siendo su carta de presentación social a los demás.
Aunque durante la etapa victoriana hubo variados estilos que se fueron poniendo de moda después de 1860 y hasta final de siglo, los cabellos se fueron usando cada vez más cortos en los hombres, pero las barbas, y especialmente los mostachos se siguieron usando con un largo contenido. Los cabellos eran tratados con distintos tipos de ceras y aceites para mantener sus mostachos y formas, e incluso se llegaron a usar armazones para mantener la forma de los bigotes o las primeras redecillas para mantener la forma del pelo durante el descanso nocturno. Así de importante era la imagen como expresión de uno mismo y de su pensamiento, educación, y estatus.

Claramente una imagen, una barba, un corte de pelo envía un mensaje directo al subconsciente de los demás, y conviene saber que mensaje enviamos y el efecto que causamos.
La disminución en las barbas se hace desde la zona de la patilla hacía la mandíbula, siendo la perilla la zona más larga y poblada y a la cual se le puede dar forma abierta, redonda o en pico.
A diferencia del aíre victoriano hipster hoy tan de moda, ésta es una barba mucho más corta, y que se adapta mejor a algunas barbas alopécicas en la zona de los pómulos, y es que alarga la patilla hasta tocar el hueso de la mandíbula bajando sobre sobre el hueso con un ángulo de unos 120 º y uniéndose a la forma natural en ángulo del bigote como se muestra en la siguiente imagen:
Como toda barba cuidada se ha de mantener limpia de pelo la zona de los contornos superior e inferior, y se recorta la barba por la zona del cuello subiéndola entre 1 y 3 centímetros sobre la nuez. Además esta zona del cuello se ha de hacer también en disminución pues el largo se va a localizar solamente en la zona de la perilla como se ve en las imágenes, pudiendo ser esta más o menos corta, aunque estableciendo un límite de unos 3 cm máximo en dicha zona pues más allá de esa longitud se perdería la forma y formalidad de la misma. Por último remarcar que el bigote se ha de recorta o ajustar por encima del labio salvo en la zona de los contornos que se deja más largo.
Y como siempre si tienes alguna duda sobre esta u otro tipo de barba bien puedes pasarte y preguntar por “La Barbería de Santo Domingo” escribirme un email o bien dejar tu comentario en este post.
Ismael, The Barber